¿Cuántas veces y a cuántas personas les deseamos un feliz año?, y ¿cuántos nos lo desearon a nosotros? ¡Muchas!, ¿no es verdad? ¿Por qué lo hacemos? Porque sabemos que si algo tenemos en común es el deseo de ser felices, de sentirnos bien, de sentirnos en paz. ¿Y se han preguntado qué se necesita para que su año sea un año feliz?, ¿de dónde viene la felicidad? Los invitamos a recordar momentos en que se hayan sentido felices, ¿qué sucedía entonces?, ¿con quién estaban?, ¿qué estaban haciendo?

Estamos convencidos que los momentos de felicidad verdadera son aquellos en los que podemos ser de beneficio, ayudar, dar, compartir, en los que nos damos cuenta de lo importantes y trascendentes que son nuestras acciones para alcanzar el bien común. Este año se nos presenta con muchos retos, y por eso nos parece vital tener siempre presente que desde un inicio deseamos para otros y para nosotros mismos un año de felicidad, descubramos qué realmente nos hace felices y dejemos que eso sea nuestra guía diaria; que nuestros pensamientos, palabras y acciones estén alineados con nuestro deseo y así todos juntos seamos creadores de un feliz 2017.